Un cubano del taekwondo fue suspendido de por vida el sábado tras perder la cabeza y tirarle una patada al juez luego de perder un combate por la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos.
El cubano Angel Matos cayó ante el kazajo Arman Chilmanov en la división de más de 80 kilos y protagonizó un escándalo junto con su entrenador Leudis González, quien también fue suspendido de por vida.
"Es una fuerte violación del espíritu del taekwondo y de los Juegos Olímpicos", indicó la Federación Internacional de Taekwondo en un comunicado. Agregó que se disponía "con efecto inmediato la expulsión terminante de entrenador y atleta de por vida en todos los campeonatos sancionados por la federación".
El anunciador oficial de la velada dijo que "todos los antecedentes del atleta en Beijing serán inmediatamente borrados".
Matos iba ganando 3-2, con 1:02 en el segundo round, cuando cayó al tatami tras recibir un contacto de su rival. Permaneció unos segundos ahí esperando recibir atención en uno de sus pies cuando el juez central dio por terminado el combate.
El cubano reclamó molesto la decisión y sin pensarlo mucho le dio una patada en el rostro al juez antes de ser contenido por su entrenador. Pasó rápido por la zona de entrevistas sin dar declaraciones.
"Nos cazaron, nos cazaron.... Todo estaba arreglado, los kazajos nos ofrecieron dinero", dijo el entrenador Gónzalez.
Agregó que la decisión de dar por terminado el combate "fue demasiado estricta".
El cubano, campeón olímpico en Sidney 2000, buscaba recuperar la gloria perdida luego de terminar undécimo en Atenas 2004.
En su primera pelea, el cubano derrotó 3-1 al italiano Leonardo Basile y en cuartos de final se impuso al chino Liu Xiaobo por punto de oro. Pero en semifinales cayó ante el surcoreano Cha Dongmi.